22 consejos para reactivarte en tu vuelta al trabajo tras vacaciones
Os comparto buenas prácticas que me han funcionado a mí como individuo, como profesional, como manager e incluso como C-level y fundador.
¿Qué tal las vacaciones? En mi caso, ha sido la primera vez que me he tomado cuatro semanas seguidas. He podido descansar de verdad, incluso del calor. La primera semana me sirvió para desconectar del curso de Product Analytics (quedan unas pocas plazas para la tercera edición), las dos siguientes estuve bien centrado en familia y amigos, y la cuarta ya empecé a pensar poco a poco en los nuevos planes para la Escuela Escribano. Entre medias, descubrí como mi hija de un año es una aventurera y no le tiene miedo a las olas del Atlántico 😅.
La vuelta al trabajo después de las vacaciones puede ser un momento duro para muchos de nosotros, ya que necesitamos readaptarnos al ritmo y las responsabilidades laborales. Como managers, es importante que ayudemos al equipo a reactivarse en el menor plazo posible para volver a recuperar la productividad.
Os comparto una serie de consejos que me han funcionado en el pasado para que los apliquéis durante las primeras semanas después de vuestro regreso.
Consejos como individuo
Día de descanso de las vacaciones: Si has hecho un viaje largo, te recomiendo que te tomes un día de descanso en tu casa antes de empezar a trabajar. Deshaz las maletas, ordena la ropa y llena la nevera. Empieza a trabajar sin tareas caseras pendientes.
Regreso progresivo: Si es posible, intenta volver a trabajar a mediados de semana. Trabajar solo dos o tres días seguidos nos permite adaptarnos más suavemente al ritmo de trabajo.
Gestiona tus energías: Es normal que te sientas cansado o incluso menos motivado después de unas vacaciones. En las próximas semanas debes coger el ritmo de nuevo. Asegúrate de tomar descansos cuando lo necesites durante el día.
Re-establece rutinas: Trata de volver a tus rutinas habituales, como el horario de comida, ejercicio o incluso la hora de acostarse, lo antes posible. Las rutinas nos ayudan a readaptarnos más rápidamente. Si tienes hijos, sé consciente de que hasta el comienzo del colegio, no estarán todas.
Organización del espacio de trabajo: Tómate un tiempo para limpiar y organizar tu área de trabajo en tu casa. Un espacio limpio y ordenado nos ayuda a aumentar la productividad y mejorar el enfoque. Date un capricho y comienza el curso con nuevos materiales.
Consejos como profesional
Tiempo para reconectar: Tómate un momento para saludar y conversar con tus compañeros de trabajo. Esto te ayudará a reintegrarte al equipo y a estar al día con cualquier novedad.
Estas primeras semanas pueden ser un buen momento para pasar más días juntos en la oficina u online para volver a reconectar.
Prioriza tus tareas: En tus primeros días, haz una lista de las tareas pendientes y priorízalas. Mi consejo es que tengas claro que debes conseguir en el corto plazo, las primeras dos semanas, para hacerlo mediante te organizas el medio plazo. Esto te ayudará a centrarte en lo más urgente y a evitar sentirte abrumado.
Pregunta por los documentos o emails mas prioritarios que debes leer. No leas todo lo que se ha compartido.
Pregunta a tus compañeros dónde te necesitan. No respondas a todos los mensajes e emails ya que muchos ya no necesitarán de tu respuesta.
Cancela las reuniones de las primeras dos semanas que no vayan a ser útiles.
Pregunta sobre las tareas más urgentes o las prioridades que debes abordar inmediatamente después de tu regreso. Es importante que hagas el check con tu manager para asegurar que estáis coordinadas.
Si dejaste proyectos o tareas pendientes, prepara un breve informe de estatus para tu manager. Esto le mostrará que estás al tanto de tus responsabilidades y te ayudará a reanudar el trabajo de manera organizada.
Si trabajáis con prioridades por trimestres naturales, os queda un mes de Q3. Posiblemente hayáis sido demasiado optimistas en verano. ¿Cuál es la prioridad número uno donde debes invertir tu esfuerzo?
Evita sobrecargarte: Es comprensible querer ponerte al día rápidamente, pero evita comprometerte en exceso. Es mejor realizar menos tareas pero hacerlas bien, que muchas tareas de manera apresurada llevándote a estrés post-vacacional. Tu energía debe crecer semana a semana.
Recoge las nuevas ideas de tus managers: Las vacaciones son un momento donde descansamos, pero a la vez, donde tenemos tiempo para pensar en nuevos enfoques e ideas. Habla con tus managers y averigua sus nuevas ideas. Anticípate para pensarlas juntos, antes de que directamente os proponga implementarlas.
Muestra iniciativa: Si has pensado ideas durante las vacaciones, o ves oportunidades de mejoras o áreas donde puedes contribuir de manera significativa, compártelas con tu manager y compañeros. Proponte para liderar los cambios.
Revisa tus metas y objetivos: La vuelta de vacaciones es un buen momento para evaluar y refrescar tus objetivos profesionales. Asegúrate de saber hacia dónde te diriges y qué deseas lograr.
¿Te estás planteando cambiar de trabajo?
Según los estudios, en torno al 30-40% de los trabajadores – depende del país e industria – piensan en cambiar de trabajo durante las vacaciones, y la mitad de ellos exploran ofertas. Las probabilidades se incrementan cuando esos trabajadores tienen que trabajar en vez de poder estar descansando totalmente. Trabajar durante vacaciones quema mucho.
Las vacaciones son un momento donde has tenido tiempo de pensar sobre tus insatisfacciones, de hablar con tu pareja, de compararte con familiares y amigos, y en definitiva, de pensar cómo quieras afrontar el nuevo año que para muchas personas comienza en septiembre.
Es importante que la decisión de cambiar de trabajo no la tomes a la ligera. Si estás descontento, define bien qué te falta en tu trabajo actual (mejor manager, siguientes pasos profesionales, mejor balance personal, proyectos más ambiciosos, mejor ambiente, más dinero). Mi recomendación es que hables con tu manager, e incluso el manager de tu manager, para expresar tus necesidades y trazar un plan para conseguirlas. Debe quedar claro que son importantes para ti, y que si no te las dan, exploraras opciones fuera.
Mucha gente evita esa conversación incómoda, y se acaba perdiendo oportunidades dentro de su empresa actual. Este tipo de conversaciones muestra tu madurez como profesional. Tu mal manager puede que sea despedido en unas semanas, puede que te ofrezcan un ascenso en breve, puede que acepten darte mejor balance personal ya que cumples tus objetivos y por supuesto, puede que te suban el sueldo o te den un bonus.
Si estás explorando cambiar, evita cambiarte al primer trabajo que te salga. Uno no debe cambiarse a la primera cuando está quemado. Comprueba que de verdad vas a mejorar en lo que necesitas, y no vas a empeorar en otros aspectos clave. Mi recomendación es que hables con actuales empleados y con ex-empleados del equipo en el que vas a trabajar para descubrir la realidad.
Consejos como manager
Aparte de los consejos anteriores como profesional, como manager te recomiendo:
Reconoce el trabajo realizado: Felicita a tu equipo por sus logros durante tu ausencia. Esto fortalecerá la moral y demostrará que valoras su autonomía y esfuerzo.
Un pequeño gesto, como traer snacks o un desayuno para el equipo, puede ser una excelente manera de agradecerles por su esfuerzo.
También es muy positivo que felicites en público a aquellas personas que han tenido un liderazgo temporal durante este tiempo – una vez confirmes que tienen ese feedback del resto de compañeros.
Construye confianza: Demuestra confianza en las decisiones tomadas por el equipo en tu ausencia, incluso si ahora requieren algún ajuste.
Si hay que deshacer alguna decisión, involucra al equipo que la tomó. Entiende su razonamiento y ayúdales a entender qué no tuvieron en cuenta. Debes evitar cambiar una decisión de golpe sin darles espacio a que te expliquen su trabajo.
Revisa proyectos y plazos, y re-establece las prioridades: Tras haber escuchado las actualizaciones, determina las nuevas prioridades y comunícalas claramente al equipo. Si trabajáis con prioridades en trimestres naturales, sólo os queda un mes de Q3. Elige bien el foco, evita abarcar todo.
Ofrece disponibilidad: Haz saber a tu equipo que estás disponible para cualquier duda o aclaración, especialmente en los primeros días de tu regreso. Anima a tu equipo a compartir cómo fue la experiencia de trabajar sin ti y si hay áreas de mejora.
Reconecta con otros managers y directivos: Esto te ayudará a estar al día con decisiones de alto nivel y alinear las acciones de tu equipo con la visión general de la empresa.
Consejos como fundador o C-level
Tu actitud tras la vuelta impactará en toda la empresa. Estos son mis consejos si tienes la máxima responsabilidad:
Actualización del estado de la empresa: Agendad una reunión en el C-level y con otros directores para obtener una actualización rápida sobre las principales métricas de negocio y de producto, eventos y decisiones tomadas durante el verano.
Previamente, suele ser muy útil hablar con empleados de diferentes niveles para obtener una perspectiva más amplia y diversa de la situación actual. Sin filtros por parte de los directores.
Os recomiendo comunicar un resumen con toda la empresa en las primeras dos semanas de septiembre para actualizar a todos los empleados con lo conseguido, con los retos y las prioridades para septiembre y Q4.
Reconoce el liderazgo interino: Si alguien asumió responsabilidades adicionales en su ausencia, reconoce y agradece públicamente su esfuerzo y compromiso. Si han conseguido mejorar las métricas, se debe destacar y premiar especialmente. ¡Trabajar en verano no es fácil!
Reserva tiempo para debatir ideas nuevas: Todo el mundo traerá ideas nuevas y cambios que proponen implementar. En vez de hacer cambios drásticos inmediatos, mi recomendación es que os vayáis de off-site dos o tres días para debatir sobre las nuevas ideas, re-evaluar riesgos y oportunidades y priorizar la estrategia. De ahí debe salir la estrategia para Q4 y el año que viene.
Reincido que es importante evitar cambios drásticos sin consultar con el equipo. Toma tiempo para comprender la situación actual, y debatir con cada uno de los equipos. Recuerda que hay un 30-40% de empleados que están pensando en cambiar de empresa. Cualquier chispa de cabreo por algo que no entienden, puede resultar en tus mejores empleados yéndose en las siguientes semanas.
Comunica la visión: Refuerza la misión y visión de la empresa a través de mensajes y en las reuniones, asegurándose de que todos siguen alineados con el propósito central.
Verifica el bienestar del equipo: Asegúrate de que la moral y la cultura de la empresa se mantengan saludables.
Septiembre es el mes de la retención. Contacta con los empleados clave para coger su feedback, sus ambiciones y tomar acciones para que vean que cuentas con ellos. Organizad iniciativas que fomenten la unión del equipo. Premiad a aquellos empleados que hayan hecho un sobre-esfuerzo durante el verano.
Como líder, tu energía y actitud tienen un impacto significativo en la empresa. Asegúrate de transmitir optimismo y confianza en público y en privado.
Enfatiza la importancia del descanso y el equilibrio trabajo-vida para todos en la empresa. People debe asegurarse de que todos los empleados hayan podido descansar; y los que no, que descansen durante las siguientes semanas.
Comunicación abierta: Transmite a tu equipo que estás de regreso y abierto a recibir comentarios, actualizaciones o inquietudes. Sé pro-activo y pregunta a empleados de todos los departamentos y niveles, tanto en la oficina como online.
Espero que los consejos te hayan sido útiles, y decidas aplicar varios en tu vuelta al trabajo. Si es así, me gustaría recibir tu feedback de cuáles te han servido más. Y si tienes algún otro, ¡me encantaría conocerlo!
¡Buena vuelta al trabajo!
Muy interesante, sobre todo para empezar la vuelta sobre una buena base. Volver es inevitable, así que todo lo bueno que pueda ser, mejor.
Gracias luis! No lo conocía